Luciana parecía reanimada y me miró divertida.
-¿Qué andas buscando? -le dije, al rato.
-Nada. No ando buscando nada. ¿Qué querés que ande buscando? No seas elemental.
De cerca la cara de Luciana era una máscara hermosa y manchada, con dos lamparones oscuros al lado de sus ojos.
-¿Sabes lo que ando buscando? Piedritas. Juguetes que perdí. Por ejemplo que alguien se enamore de mi como antes. Como hace muchísimo tiempo aquellos muchachitos sonsos a los que quería como una loca. Eso ando buscando.
Cuentos completos-Tierna es la noche (pàg. 113)
Ricardo Piglia
Anagrama
Cap comentari:
Publica un comentari a l'entrada